Én estos momentos debería estar en Hong Kong. No hubo suerte. Trabajo en "Waukegan". Vivo en Chicago.
Ahora debería (¿debería?) ser casi feliz, estar enamorado, conocer gente, otra sociedad, otro país, echar de menos con cariño y hablar por teléfono, con cualquier soporte informático, ayudar, ser ayudado, y planear viajes, navidades, conocer El Cañón del Colorado, Nueva Orleans, Nueva York, California...
En estos días debería despertarme con otro sentimiento en el pecho, y las imágenes deberían producir también otros sentimientos.
Hay veces, muchas veces, en las que me siento torpe por no poder olvidarme de mi pasado reciente, por seguir sintiéndolo. Me siento torpe por no poder expulsar sentimientos, por no poder limpiar y vaciar mi mente y mi corazón. Por no poder disfrutar el presente sin que ellos estén allí recordándome que todo debería ser de otra manera.
Me siento torpe por no haber detenido lo que debería haber detenido hace casi dos años. Por no haberlo parado ninguna de las veces. Por no haber conseguido, ya que no lo detenía, solucionarlo.
Y aquí estoy, con este problema de dos qu sólo tengo yo, que sólo siento yo. Con este problema que nunca tuve cuando era sólo uno. Con este problema que por instantes no veía cuando creía que éramos dos.
sábado, 13 de octubre de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Desde el otro lado del mundo. Sigo leyendo cada actualización, aunque me mantenga en silencio. Me recuerdas sensaciones y angustias pasadas. De esas que parece que sólo sientes tú, que sólo te han atrapado a ti. Esto ocurre hasta el momento en que miras atrás y te das cuenta de que son comunes, en algún momento, a casi todos. Entonces, se terminan.
Publicar un comentario